Sin categoría

El ABC para sanar un corazón roto: guía emocional en tiempos de ruptura

Los duelos amorosos prolongados pueden desencadenar trastornos de ansiedad, depresión o conductas de aislamiento.

Redacción Más Sana

Las rupturas amorosas se han convertido en parte del paisaje emocional de nuestra época. Ya no solo se viven en privado: se narran, comparten y reviven en redes sociales, exponiendo un dolor que, aunque común, sigue siendo profundamente personal. Frente a este escenario, especialistas en salud mental proponen regresar a lo básico: un ABC emocional que ayude a transitar el duelo amoroso con dignidad, conciencia y herramientas reales para sanar.

A: Aceptar el dolor sin negarlo

Para muchos, el instinto inicial es minimizar lo que sienten o distraerse a toda costa. Sin embargo, psicólogos clínicos advierten que negar el dolor solo alarga el proceso de recuperación.

“No hay crecimiento sin reconocer lo que se ha perdido. El cuerpo y la mente necesitan tiempo para procesar la ausencia y adaptarse”, explica la terapeuta Karla Beltrán, quien trabaja con pacientes en duelo afectivo.

Aceptar el dolor no significa rendirse, sino darle espacio para que cumpla su función: señalar lo que dolió y abrir la puerta a la transformación personal.

B: Buscar apoyo real

Frente al mito del autosuficiente emocional, los especialistas son claros: acompañarse en el proceso es fundamental. Ya sea con amistades empáticas, familiares o ayuda profesional, contar con una red de apoyo confiable permite expresar lo que se siente sin juicio ni presiones.

“Quienes intentan salir adelante en soledad suelen reprimir sus emociones, lo que puede intensificar la tristeza o llevar al aislamiento”, advierte la psicóloga clínica Mariana Torres.

Buscar apoyo no es señal de debilidad, sino una estrategia saludable para canalizar el dolor y evitar que el sufrimiento se vuelva crónico.

C: Cultivar el autocuidado

Dormir bien, mantener una alimentación equilibrada, hacer ejercicio moderado o simplemente reconectar con pasatiempos personales puede marcar la diferencia. En palabras de la psiquiatra Gabriela Fernández, “un corazón roto no se repara con excesos ni evasiones, sino con rutinas que reconstruyen la identidad y refuerzan el amor propio”.

El autocuidado es el terreno fértil donde pueden volver a crecer la autoestima, la serenidad y la apertura a nuevos vínculos.

Una herida emocional que merece atención

Según datos del Instituto Nacional de Psiquiatría, los duelos amorosos prolongados pueden desencadenar trastornos de ansiedad, depresión o conductas de aislamiento, especialmente en jóvenes que enfrentan su primera ruptura sentimental. Por ello, fomentar una cultura de contención emocional resulta clave.

En un contexto donde el amor se vive a ritmo de notificación y story, sanar requiere pausa, honestidad y compasión. Y aunque no hay fórmulas mágicas, el ABC emocional puede ser un punto de partida real para quienes enfrentan uno de los dolores más humanos y universales: un corazón roto.

Categorías:Sin categoría

Etiquetado como:,

Deja un comentario