Una práctica que gana terreno como herramienta efectiva para mejorar la salud mental.

Revista Más Sana

En un mundo marcado por la prisa, las cargas laborales y la sobreexposición a estímulos digitales, el estrés se ha convertido en un problema cotidiano. Frente a este panorama, el mindfulness —o atención plena— emerge como una estrategia eficaz para manejar el estrés, reducir la ansiedad y mejorar la calidad de vida.

El mindfulness consiste en entrenar la mente para centrarse en el momento presente, con aceptación y sin juicio. Esta práctica, derivada de tradiciones budistas, ha sido adoptada en contextos clínicos y laborales como una técnica respaldada por la ciencia.

“Estudios demuestran que practicar mindfulness de manera constante disminuye los niveles de cortisol, la hormona del estrés, y mejora la regulación emocional”, explica la psicóloga clínica Verónica Torres, especialista en terapias de tercera generación.

Técnicas para incorporar el mindfulness a la rutina

Lo más atractivo del mindfulness es que puede integrarse fácilmente en las actividades diarias. Aquí algunos ejercicios prácticos:

• Respiración consciente: Dedicar 3 minutos a observar la respiración, inhalando y exhalando lentamente, sin modificarla, ayuda a calmar la mente.
• Escaneo corporal: Al final del día, recorrer mentalmente cada parte del cuerpo, identificando tensiones y relajándolas, favorece un descanso más profundo.
• Atención plena en tareas cotidianas: Al lavar los platos o tomar una ducha, concentrarse en las sensaciones físicas del agua o el jabón, dejando de lado pensamientos intrusivos, permite reconectar con el presente.
• Pausa consciente: Antes de una reunión o tarea importante, detenerse unos segundos para tomar conciencia del entorno y del cuerpo.

Una herramienta accesible y sin efectos secundarios

El mindfulness puede practicarse en cualquier lugar y no requiere equipo especial. Muchas aplicaciones móviles como Headspace, Insight Timer o Petit Bambou ofrecen meditaciones guiadas para principiantes, lo que facilita su integración al estilo de vida moderno.

Cada vez más escuelas, empresas y centros de salud en México incluyen programas de mindfulness entre sus actividades de bienestar.

El manejo del estrés no tiene una solución única, pero el mindfulness ofrece una vía accesible, práctica y científicamente respaldada para cuidar la salud mental en el día a día.