Es importante combinar una dieta saludable con otras estrategias de manejo del estrés, como la actividad física, la meditación y el apoyo emocional.

Redacción Más Sana

La ansiedad puede convertirse en un problema que afecta profundamente nuestra calidad de vida. En el programa «Más Sana Live» de Revista Más Sana, la psicóloga en nutrición y biomagnetista, Lulú Farrera, compartió valiosos consejos sobre cómo abordar la ansiedad a través de la alimentación.

Desde tiempos remotos, el ser humano ha buscado en los alimentos una forma de lidiar con el estrés y la ansiedad. Según Farrera, elegir los alimentos adecuados puede marcar una gran diferencia en nuestro estado emocional.

1. Chocolate Oscuro: Este manjar, especialmente el que tiene un alto contenido de cacao (al menos un 70%), puede mejorar el flujo sanguíneo al cerebro y proporcionar una sensación de bienestar.

2. Alimentos Ricos en Vitamina D: La vitamina D desempeña un papel crucial en el funcionamiento del sistema nervioso. Optar por alimentos como las hojas verdes oscuras puede contribuir a mantener la ansiedad a raya.

3. Frutas: Frutas como la naranja, la piña y el plátano son una excelente opción. Son ricas en vitaminas, minerales y fibra, que pueden ayudar a equilibrar el estado de ánimo.

4. Semillas y Frutos Secos: Las almendras, nueces y avena son excelentes opciones. Estos alimentos son ricos en nutrientes que apoyan la salud mental y pueden proporcionar una sensación de saciedad.

5. Jugos Naturales: No podemos olvidar la importancia de mantenerse hidratado. Los jugos naturales de frutas como naranja o piña son una excelente opción, ya que además de hidratar, aportan nutrientes esenciales.

En conclusión, la alimentación puede ser una herramienta poderosa para combatir la ansiedad, pero es solo una parte del cuadro completo.

Es importante combinar una dieta saludable con otras estrategias de manejo del estrés, como la actividad física, la meditación y el apoyo emocional.

Con el enfoque adecuado, podemos mejorar nuestra salud emocional y bienestar general. ¡Recuerda siempre buscar el equilibrio y escuchar a tu cuerpo!