Redacción Más Sana

El síndrome de Asperger es un trastorno del espectro autista (TEA) que afecta principalmente la capacidad de una persona para socializar y comunicarse de manera efectiva con los demás; no obstante, quienes padecen dicha enfermedad son seres humanos completos, así lo explica el experto en manera de TDAH, Pablo Méndez.

Durante entrevista en Más Sana Live, explicó que todas las personas son diferentes, y niños y adultos con esta enfermedad tienen una forma distinta de entender y ver el mundo.

«Más allá de las definiciones en libros o en internet, yo creo que son personas que tienen un gran potencial y una gran capacidad de seres humanos, y que si nosotros les comprendemos un poco la manera en como ven la vida, podríamos detonar muchas posibilidades», expresó.

Desmintió el mito que todos los casos de Asperger sean personas con un «genio», pues aunque muchos son muy buenos en lo que hacen pues focalizan sus intereses, pero hay muchos otros casos en los que tienen una inteligencia desbordada pero no uniforme.

¿QUÉ ES EL ASPERGER?

Fue considerado anteriormente como un trastorno independiente, pero desde la actualización del Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales (DSM-5), en 2013, el término «síndrome de Asperger» ya no se utiliza oficialmente y se incorporó dentro de la categoría más amplia de Trastorno del Espectro Autista (TEA).

Algunas características comunes del síndrome de Asperger incluyen:

Dificultades en la interacción social: Las personas con síndrome de Asperger pueden tener dificultades para comprender las sutilezas de la interacción social, como el lenguaje no verbal o las normas sociales implícitas.

Intereses y comportamientos repetitivos: Pueden desarrollar intereses muy intensos y enfocados en áreas específicas, así como comportamientos repetitivos o rituales.

Habilidades lingüísticas avanzadas: A menudo, las habilidades lingüísticas, como el vocabulario y la gramática, son avanzadas para su edad, pero pueden tener dificultades para entender el significado social del lenguaje.

Falta de empatía: Pueden tener dificultades para comprender y responder adecuadamente a las emociones de los demás.

Rutinas y estructuras: Muchas personas con Asperger prefieren la rutina y la estructura en su vida diaria y pueden experimentar ansiedad o estrés cuando se enfrentan a cambios inesperados.

Es importante destacar que cada persona con síndrome de Asperger es única, y la severidad de los síntomas puede variar ampliamente. Aunque pueden enfrentar desafíos en la interacción social, también pueden tener habilidades y talentos excepcionales en áreas específicas.

El diagnóstico y el tratamiento del síndrome de Asperger generalmente involucran la colaboración de profesionales de la salud, como psicólogos y terapeutas ocupacionales, y se centran en el apoyo para desarrollar habilidades sociales y adaptarse a situaciones sociales.

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