La pandemia no solo trajo consigo una crisis sanitaria, sino que también paralizó la vida económica y social de muchas mujeres poblanas.

Redacción Más Sana

Para comprender mejor los desafíos que enfrentan en la actualidad, tuvimos el privilegio de conversar con Marichu Arce, Presidenta de la Fundación Mujeres Unidas Generando Lazos, en una entrevista exclusiva con Más Sana Live.

Explicó que los mayores retos que tienen como mujeres son económicos, toda vez que la pandemia del COVID-19 dejó un impacto profundo en la vida de las mujeres en Puebla, marcando un antes y un después en sus trayectorias.

La pandemia no solo trajo consigo una crisis sanitaria, sino que también paralizó la vida económica y social de muchas mujeres poblanas.

Marichu Arce destacó que uno de los mayores retos que enfrentan las mujeres en la actualidad es de índole económica. La pérdida de empleos, el cierre de negocios y la falta de oportunidades laborales han generado una situación de vulnerabilidad para muchas mujeres en la región.

REACTIVANDO LA ECONOMÍA FEMENINA

Ante este panorama, surge la necesidad urgente de encontrar formas para reactivar la economía de las mujeres. La Fundación Mujeres Unidas Generando Lazos ha asumido este desafío con determinación. Su labor se centra en ofrecer cursos y talleres técnicos en diversas colonias del sur de Puebla, con el objetivo de empoderar a las mujeres y brindarles las herramientas necesarias para alcanzar su desarrollo personal y profesional.

EL PAPEL DE LA FUNDACIÓN

La Fundación se ha convertido en un pilar fundamental para muchas mujeres en la región. A través de sus programas, buscan identificar las habilidades y capacidades de las participantes, ofreciéndoles formación y orientación en áreas clave como la adquisición de materias primas, la gestión empresarial y la distribución de productos.

En resumen, la labor de la Fundación Mujeres Unidas Generando Lazos es vital en la actualidad, ya que contribuye significativamente a fortalecer la economía y el bienestar de las mujeres poblanas. En tiempos de incertidumbre, su trabajo representa un rayo de esperanza y un impulso para el progreso de la comunidad femenina en la región.